El diario de Lilith es un recopilatorio de experiencias de una mujer que ha hecho del sexo un método de comunicación con el ser humano.
Independientemente del género de la persona con la que se relaciona, Lilith usa el sexo como forma de dialogo y su cuerpo como medio de trasmisión.
Lilith no se cuestiona si está bien o no lo que hace, simplemente lo hace porque le procura placer. No se interesa por las personas, por lo que dicen o por lo que aparentan, le gusta imaginarse lo que hay debajo de la ropa y fantasea con cómo usan su cuerpo.
Antes de querer conocer a una persona, ella la desea.
Su belleza le permite llegar fácilmente a relacionarse.
Ella no elige con quién practica sexo, son ellos o ellas las que deciden dónde y cuándo, ella se deja llevar porque nunca creyó que el sexo estuviera relacionado con el aspecto exterior, ella lo relaciona con el deseo y la química. Cuanto más la desean más placentero será acostarse con esta persona.
Para ella, cada apretón de mano, cada encantado de conocerte, los besos en las mejillas, son la posibilidad de tener unas horas de buen sexo.
“Hay cuerpos que llenan camas vacías y camas que llenan cuerpos vacíos.”
¿Qué tipo de cuerpo es el tuyo?
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